En un acto profundamente simbólico y cargado de sentido histórico, el I Conciliábulo de la Masonería Forestal de Paraguay está marcando un nuevo hito en el camino de la reconstrucción espiritual y organizativa de la Antigua y Franca Carbonería en el país.
Bajo el lema "Reunir lo Disperso", los carbonarios hemos dado un paso firme hacia la restauración de un ideal que trasciende el tiempo y las fronteras: el de la Unión, la Libertad, la Igualdad y la Humanidad vividas en el silencio del bosque y en la fuerza de la unión.
Bajo el lema "Reunir lo Disperso", los carbonarios hemos dado un paso firme hacia la restauración de un ideal que trasciende el tiempo y las fronteras: el de la Unión, la Libertad, la Igualdad y la Humanidad vividas en el silencio del bosque y en la fuerza de la unión.
La Declaración
Esta declaración, emanada desde el corazón mismo del Bosque de Hernandarias —denominado con justa causa la Floresta Negra de Paraguay— no solo reafirma el compromiso con la tradición forestal y carbonaria, sino que también representa una respuesta firme y clara a la dispersión que el tiempo y las circunstancias han provocado en nuestras filas.
Aquel fuego simbólico encendido en 2004 por los Grandes Maestros Fundadores con la llegada del Rito Masónico Forestal Carbonario a Paraguay no se ha extinguido. Solo aguardaba el momento adecuado para avivarse nuevamente, esta vez con mayor claridad y propósito.
La decisión de levantar nuevamente la Antigua y Franca Carbonería bajo la denominación de Alta Venta Carbonaria de Paraguay, representa una continuidad espiritual y organizativa de aquel legado.
La voluntad expresa de "construir un Refugio de Unión", como reza la declaración, es una clara invitación a dejar atrás diferencias, egos e intereses fragmentarios. Se convoca a todos los BB:. PPr:. CCarb:. —presentes o ausentes— a reconocerse mutuamente, respetar los grados legítimamente alcanzados y trabajar bajo una misma visión: la de cultivar la Libertad bajo la plena Igualdad y practicar el amor a la Humanidad.
La Alta Venta Carbonaria de Paraguay se plantea un proyecto ambicioso y profundamente necesario: dotar a la Orden de un nuevo marco estatutario y reglamentario que le permita existir plenamente en el Paraguay contemporáneo, respetando las leyes del Estado sin perder de vista sus raíces simbólicas, filosóficas e históricas. Este equilibrio entre la tradición viva y la legalidad moderna es la base sobre la cual podrá florecer nuevamente la Masonería Forestal Carbonaria en el país.
Hasta finales del año 2025, se prevé la culminación de los Estatutos, así como la elaboración de Reglamentos para las distintas estructuras de trabajo (VV:., BB:. y CCh:.), permitiendo un funcionamiento coherente, orgánico y adaptado a la realidad actual.
Hasta finales del año 2025, se prevé la culminación de los Estatutos, así como la elaboración de Reglamentos para las distintas estructuras de trabajo (VV:., BB:. y CCh:.), permitiendo un funcionamiento coherente, orgánico y adaptado a la realidad actual.
Reunir lo Disperso no es solo un acto administrativo ni un simple gesto ritual. Es, sobre todo, una actitud espiritual. Es reconocer que todos y todas hemos caminado, a veces por senderos distintos, pero que el bosque —ese símbolo eterno de vida, misterio y conocimiento— nos ofrece nuevamente su sombra y su guía para encontrarnos, reconocernos y continuar.
Nada está dicho hasta que acabe el carbón o se extinga la llama.
Porque siempre, debajo de las cenizas hay un poco de fuego para iniciar todo el proceso.
Porque siempre, debajo de las cenizas hay un poco de fuego para iniciar todo el proceso.
A la sombra del Frondoso Árbol de la Vida, en el silencio sagrado de la Floresta Negra de Paraguay, ha comenzado una nueva etapa.
Aquellos que alguna vez fueron dispersos ahora saben que son parte de un TODO mayor.
La Carbonería vuelve a levantarse. Y con ella, el ideal profundo de transformación personal y social que siempre ha animado a los Verdaderos Iniciados del Bosque.
"Sin prisa, pero sin pausa"
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